El PIB creció un 0,9% en el primer trimestre de 2015, dos décimas porcentuales más que en el trimestre anterior. En tasa anualizada, dicho incremento equivale al 3,8% —en adelante, las tasas de crecimiento se expresarán en estos términos—. La aportación de la demanda nacional fue de 3,4 puntos porcentuales (pp), mientras que la aportación del sector exterior fue de 0,4 pp, positiva por segundo trimestre consecutivo.
GRÁFICO 1
El consumo privado moderó su crecimiento en comparación con el trimestre anterior, pero el consumo público experimentó un sensible repunte, pese a lo cual su tasa interanual mantiene un ritmo muy moderado —un ascenso del 0,1%— en línea con los resultados de los trimestres anteriores. En términos nominales el ascenso de este componente de la demanda se explica, al menos en buena parte, a la devolución de parte de la paga extra retirada en 2012 a los funcionarios.
Las exportaciones de bienes descendieron, pero las de servicios registraron un llamativo crecimiento, de tal modo que el resultado para las exportaciones totales fue un crecimiento del 4,2%, que ha hecho posible que la aportación al crecimiento del sector exterior sea positiva. Las importaciones aumentaron, aunque menos de lo esperado.
Por el lado de la oferta el VAB creció en todos los sectores. El crecimiento del empleo en términos equivalentes a tiempo completo fue algo superior a lo previsto, un 3,1%, destacando especialmente el aumento del mismo en el sector de la construcción. La remuneración por asalariado también aumentó con fuerza, pero ello fue debido a la mencionada devolución de la paga extra a los empleados públicos. La tendencia de los salarios en los servicios de mercado y en la construcción es de moderado descenso, y en la industria de ligero ascenso.
En suma, el PIB sigue acelerando su crecimiento impulsado por el efecto de varios shocks externos —caída del precio del petróleo, rebaja del IRPF, devolución de la paga a los empleados públicos y efecto del ciclo electoral sobre la obra pública—. Los indicadores disponibles relativos al inicio del segundo trimestre apuntan a una posible aceleración hasta el 1,1%, aunque el agotamiento de los efectos mencionados hace esperar una ralentización a partir del trimestre siguiente.