La campaña electoral ha dibujado un paisaje económico que levita sobre la realidad. Los debates se han centrado en las políticas internas, cuando la economía española está estrechamente interconectada con la de nuestros socios europeos, olvidando que muchas de las decisiones están condicionadas por normas decididas en Bruselas –reglas de déficit público, acuerdos comerciales con las principales potencias del mundo, directrices que se derivan del…
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