Una de las consecuencias más preocupantes de la crisis generada por la pandemia es el deterioro de la situación financiera de las empresas europeas. El cierre de la economía durante la primera ola de contagios provocó una pérdida abrupta de ingresos, que se intentó contener con la concesión de créditos en condiciones ventajosas y avalados por los Estados (ICO en el caso de España). Como consecuencia, si bien las cargas salariales asociadas a la reducción forzada de actividad fueron asumidas por el erario público (mediante dispositivos tipo ERTE), la deuda empresarial se disparó, especialmente en los sectores más afectados por las restricciones de movilidad.
Con la prolongación de la crisis, y la sucesión de fases de apertura y cierre de la economía, la situación patrimonial de muchas empresas y pequeños negocios se ha deteriorado, amenazando la supervivencia de parte del tejido productivo. Ante la perspectiva de quiebras en cascada y de una multiplicación de impagos, con el riesgo que ello entraña para las entidades financieras y para la financiación del conjunto de la economía, los Gobiernos han ido optando por instrumentar ayudas directas y operaciones de refinanciación. La nueva estrategia pretende reforzar la solvencia empresarial, y así preservar numerosos negocios viables al borde de la insolvencia, al menos hasta que la generalización de la vacunación facilite la relajación de las restricciones y la recuperación de la economía.
El objetivo de esta nota es presentar las iniciativas recientes de los gobiernos de Alemania, España, Francia e Italia en materia de ayudas directas. Por su parte, las ayudas indirectas (aquellas que persiguen el fortalecimiento de la situación patrimonial mediante reestructuraciones de deuda, inyecciones de capital, préstamos participativos y otros instrumentos financieros) se abordarán ulteriormente.
Criterios de concesión de las ayudas
En algunos países como Alemania y Francia las ayudas se empezaron a conceder a partir del otoño, en plena segunda ola. Pero el dispositivo se reservaba para aquellas empresas que se enfrentaban a una restricción administrativa de actividad. Desde el inicio del año, sin embargo, las ayudas se han ampliado a todos los sectores. España e Italia han seguido los pasos, pero con una importante diferencia: mientras que en Italia las ayudas se han generalizado al conjunto de la economía, al igual que ocurre en Alemania y Francia, en España se limitan a los sectores más perjudicados (comercio, hostelería, ocio, etc).
Por otra parte, la concesión de las ayudas depende de umbrales determinados por el porcentaje de ingresos perdidos por la crisis (cuadro 1). En Alemania, España e Italia, solo los negocios que han reducido su facturación al menos un 30% con respecto a 2019 pueden solicitar las ayudas. En Francia los criterios son más permisivos –especialmente en los sectores más afectados por la crisis, que tienen derecho a una transferencia desde el primer euro perdido.
El requisito de viabilidad parece tener poco peso en todos los países, tal vez porque no es fácil establecer criterios objetivos sin retrasar excesivamente la asignación de los recursos. Los gobiernos están sobre todo preocupados por limitar el desgaste del tejido productivo —aunque esto entrañe la perpetuación de algunos negocios inviables—. En el caso de España, la normativa solo excluye de las ayudas a negocios que ya incurrían en pérdidas antes de la crisis. Y en Alemania, la evaluación del grado de viabilidad corre a cargo de los Länder [1].
Cuadro 1
Requisitos para obtener las ayudas
País | Sectores | Porcentaje de reducción de ingresos a partir del cual una empresa puede obtener una ayuda |
---|---|---|
Alemania | Todos | 30% (empresas con facturación hasta 750 millones) |
España | Solo los más afectados por la crisis | 30% |
Francia | Todos |
• Empresas en sectores más afectados: desde el primer euro perdido.
• Empresas con restricciones de actividad por Covid: pérdidas superiores al 20% • Otras empresas: pérdidas superiores al 50% |
Italia | Todos | Otras empresas: pérdidas superiores al 50% |
Fuente: Funcas a partir de normativas nacionales.
Cuantía de las ayudas
El sistema alemán es el más generoso de los cuatro examinados, especialmente en relación al tope de ayudas que se puede otorgar (hasta 1,5 millones de euros, ver cuadro 2). Sin embargo, solo los costes fijos se tienen en cuenta para el cálculo de las prestaciones —frente a los otros tres países, que se basan en la pérdida total de facturación—.
La cuantía de las ayudas es relativamente reducida en España en comparación con los otros tres países. Solo se compensa entre el 20 y el 40% de los ingresos perdidos por las empresas de los sectores más afectados por la pandemia, frente al 20-60% en Italia y hasta el 100% en el caso de los pequeños negocios en Francia. La tasa de compensación puede llegar hasta el 90% en Alemania (si bien, como ya se ha mencionado, solo se aplica a los costes fijos).
Sin embargo, España es el único país que concede una prestación mínima de 4.000 euros para todas las empresas que cumplan los requisitos de concesión de las ayudas. Esta circunstancia podría favorecer en especial a los pequeños negocios. Cabe también resaltar que, en Francia, las empresas con una caída de facturación superior al 50% y que no se han visto afectadas por las restricciones de actividad ni forman parte de los sectores prioritarios (hostelería, etc.), pueden recibir una prestación global de 1.500 euros.
Cuadro 2
Monto de las ayudas
País | Cuantía de la transferencia (en €) | Tope máximo |
---|---|---|
Alemania | • Entre 40% y 90% del coste fijo • Ayudas adicionales disponibles para la digitalización |
1.500.000 € |
España | 3.000 € para autónomos y pequeños negocios, y entre 20% y 40% para el resto (con un mínimo de 4.000 €) | 200.000 € |
Francia | Entre 15% y 100% de facturación perdida (una suma global de 1.500 € en algunas circunstancias) | 200.000 € |
Italia | Entre 20% y 60% de facturación perdida | 150.000 € |
Fuente: Funcas a partir de normativas nacionales.
Coste presupuestario e implementación
El coste estimado de las medidas refleja las características de los programas, cuyo diseño es más generoso en Alemania y Francia, según lo anteriormente expuesto (gráfico 1). Además, en el caso de Francia, no se determina un tope presupuestario, porque se considera que las ayudas forman parte de los estabilizadores automáticos y, por tanto, el gasto total fluctuará en función de la asignación de las ayudas.
Gráfico 1
Fuente: Funcas a partir de normativas nacionales (en el caso de Francia: gasto efectivo a 29 de marzo).
Finalmente, la gestión de las medidas difiere significativamente entre países. En Francia e Italia, las solicitudes se realizan directamente desde el portal de la Agencia Tributaria, que es el ente encargado de conceder las ayudas. En Alemania y España, la implementación corre a cargo de las administraciones regionales —en el caso de España, previa convocatoria por cada una de las comunidades autónomas—.
Principales conclusiones sobre el caso de España
Las ayudas que establece el Real Decreto-ley de medidas extraordinarias de apoyo a la solvencia empresarial son similares a las que se aplican en los otros tres países, en cuanto al porcentaje de pérdidas que se compensan. Además, al incorporar un mínimo (de 4.000 euros), el dispositivo español tiende a favorecer a los pequeños negocios.
Sin embargo, la normativa española llega varios meses más tarde que los otros tres países. Por otra parte, su cobertura es relativamente reducida, por aplicarse solo a los sectores más perjudicados por la pandemia. Pero el principal riesgo atañe a la puesta en marcha, más complejo que en los otros países, algo que podría retrasar significativamente la llegada de las ayudas además de plantear desafíos de gestión y de disparidad entre las diferentes comunidades autónomas.
[1] El criterio de viabilidad es más prominente en las ayudas indirectas, como aparecerá en la próxima nota.
Anexo. Información detallada
I. Alemania
Tercer paquete de ayudas-puente (Überbrückungshilfe III, desde enero de 2021).
Cobertura
- Empresas con una facturación inferior a 750 millones de euros en 2020 que han sufrido una pérdida de facturación superior al 30% en comparación con 2019.
Cuantía de las ayudas
- La ayuda directa cubre los costes fijos hasta 1,5 millones de euros y estará en vigor hasta finales de agosto.
- Con una pérdida de facturación superior al 70%, la ayuda cubre el 90% del coste fijo. La cobertura es del 60% para una pérdida de facturación de entre 50-70%, y 40%, para una pérdida de entre 30-50%.
- Ayudas adicionales para inversión en digitalización, conexión a plataformas digitales, etc.
Presupuesto
- 50.000 millones de euros
Implementación de las ayudas
- Las ayudas se piden a los Länder según una pauta común decidida por el gobierno federal. Una auditoría es necesaria previamente a la concesión de la ayuda.
- El coste de los trámites de presentación de las ayudas corren a cargo del Estado.
Información sobre el programa alemán.
II. España
RDL de medidas extraordinarias de apoyo a la solvencia empresarial en respuesta a la pandemia de la COVID-19.
Cobertura
- Empresas de los sectores más afectados por la crisis, con una pérdida de ingresos en 2020 superior al 30% con respecto a 2019. Las empresas que habían realizado pérdidas en 2019 quedan excluidas.
Cuantía de las ayudas
- 3.000 euros para los “empresarios o profesionales que apliquen el régimen de estimación objetiva en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas” (generalmente autónomos).
- El 40% de la pérdida de ingresos que supere el umbral del 30%, para las empresas de hasta 10 empleados. Para las de más de 10 empleados, el porcentaje de compensación es del 20%. Las compensaciones pueden ser más elevadas en Baleares y Canarias.
La ayuda no podrá ser inferior a 4.000 euros ni superior a 200.000.
Presupuesto
- 7.000 millones.
Implementación de las ayudas
- Las CCAA son las encargadas de presentar convocatorias para solicitar las ayudas, previo convenio con el Ministerio de Hacienda y en base a la información suministrada por la Agencia Tributaria.
Información sobre el programa español.
III. Francia
Fonds de solidarité pour les entreprises, indépendants et entrepreneurs (en vigor desde septiembre 2020).
Cobertura
- Empresas y negocios que han sido objeto de restricciones de actividad por razones de pandemia y han perdido al menos 20% de su facturación.
- Empresas de sectores más afectados por la crisis (hostelería, ocio, comercio).
- Cualquier empresa con una pérdida de facturación de más de 50%.
Cuantía de las ayudas
- Toda la facturación perdida, hasta el límite de 10.000 euros por mes. O 20% de la facturación perdida, hasta un límite de 200.000 euros.
- Toda la facturación perdida, hasta 10.000 euros por mes. O 15-20% de la facturación perdida hasta un límite de 200.000 euros.
- 1.500 euros mensuales.
Presupuesto
- Ningún presupuesto pre-asignado. El coste de las medidas se eleva a 20,4 mil millones de euros (a fecha del 28 de marzo de 2021). Cerca de 2 millones de empresas han recibido una ayuda.
Implementación de las ayudas
- Las empresas someten directamente sus peticiones en línea a la Agencia Tributaria.
Información sobre el programa francés.
IV. Italia
Decreto Sistegno (marzo 2021)
Cobertura
- Empresas de menos de 10 millones de euros de facturación en 2019 que han sufrido una pérdida de más del 30% de sus ingresos
Cuantía de las ayudas
- Las empresas con una facturación inferior a 100.000 euros reciben una compensación del 60% de la pérdida. Para los tramos de facturación de 100.000-400.000, 400.000-1 millón, 1-5 millones, y 5-10 millones, la compensación alcanza 50%, 40%, 30%y 20%, respectivamente.
- La compensación no puede exceder 150.000 euros por mes.
Presupuesto
- 11.000 millones, que se añaden a las ayudas anteriores a marzo (el total acumulado podría alcanzar 25.000 millones).
Implementación de las ayudas
- Las empresas accederán a las ayudas a parir del 8 de abril a través de una plataforma especial gestionada por el ministerio de Hacienda.
Información sobre el programa italiano.