Los datos de empleo correspondientes a enero continúan en la positiva senda de los dos últimos años. El número de afiliados a la Seguridad Social, como es habitual en este mes por motivos estacionales, se redujo en 204.000. Eliminando el componente estacional, el resultado, según cálculos de Funcas, es un incremento de la afiliación de 43.000 personas, cifra que se encuentra en torno a la media de los meses anteriores, lo que indica que en el primer mes del año se mantenía el mismo ritmo de creación de empleo que en meses anteriores.
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Desde el punto de vista sectorial, una vez más hay que destacar la fortaleza que presenta la actividad industrial, que encadena otro mes de creación de empleo en términos desestacionalizados. Además, aceleró el ritmo, siendo el mes en el que más aumentó la afiliación en este sector desde que se inició su recuperación hace justo dos años. Este positivo resultado está en línea con el excelente registro que se conoció ayer del índice PMI de manufacturas, que experimentó un notable repunte en el mes de enero. La construcción también sigue incrementando el número de afiliados en términos desestacionalizados, y, por supuesto, los servicios.
En cuanto al desempleo registrado, igualmente aumentó en enero por motivos estacionales, pero el incremento, que ascendió a 57.000 personas, fue el más bajo de un mes de enero desde 2004. Corrigiendo la estacionalidad, según cálculos de Funcas, se produjo un descenso del desempleo de 44.000, uno de los mejores resultados desde que se inició la recuperación.
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Así pues, la favorable evolución de las variables del mercado laboral se mantenía en enero pese a las tensiones vividas en los mercados financieros mundiales, y ajena también a la incertidumbre política derivada de la formación de un nuevo Gobierno. Era de esperar, ya que, en caso de que dicha incertidumbre ejerza algún efecto negativo sobre el empleo, sería demasiado pronto para sentirse.