Entre la abundante información sobre la economía española publicada en las dos últimas semanas, destacan las afiliaciones a la Seguridad Social de septiembre. Es este un indicador al que los analistas de la coyuntura prestamos mucha atención, pues constituye un termómetro perfecto de la evolución del empleo y, por consiguiente, del conjunto de la economía.
En esta ocasión los datos se ajustaron bastante bien a lo previsto. Septiembre es un mes en el que terminan muchos trabajos de carácter temporal ligados a la temporada turística veraniega, así que no suele destacar por creación de empleo. En los años de expansión entre 2001 y 2007, la variación media mensual de las afiliaciones en este mes fue de -13.300, y en los años de recesión (2008-2013), de -67.000. El año pasado se produjo un aumento de 12.200 y este año han vuelto a aumentar en 8.900. Se puede concluir, por tanto, que en comparación con el comportamiento histórico, el dato no ha sido malo. Otra forma de analizar las cifras es ver la variación sobre la serie corregida de estacionalidad, que permite comparar en términos homogéneos sobre el mes o meses precedentes, aunque siempre deberemos tener en cuenta que los métodos de corrección de la estacionalidad dan cifras que hay que interpretarlas dentro de unos márgenes de error. Aquí observamos un aumento mensual de unas 35.000 afiliaciones. Si durante doce meses consecutivos se repitiera esta variación, en un año tendríamos un aumento de 420.000, cifra que no está mal, aunque todos desearíamos más dado el alto nivel de paro que hay que absorber.
GRÁFICO 1
(1) Sin empleados del hogar y cuidadores no profesionales. Fuentes: M. de Empleo y Funcas (desestacionalización).
GRÁFICO 2
(1) Sin empleados del hogar y cuidadores no profesionales. Fuentes: M. de Empleo y Funcas (desestacionalización).
Con el dato de septiembre tenemos el tercer trimestre completo, que es más significativo que el dato de un solo mes. El aumento sobre el trimestre anterior, sobre la serie desestacionalizada y corregida de factores atípicos, es de 110.000, un 2,7% en tasa anualizada. Ambas cifras son significativamente inferiores a las del segundo trimestre, en el que las afiliaciones aumentaron en 162.000, un 4% en tasa trimestral anualizada. Así pues, se observa una clara desaceleración en el ritmo de aumento de este indicador (gráfico 1). Los sectores productivos que más acusan esta moderación son, en primer lugar, la construcción, seguida de los servicios de mercado y sobre todo de no mercado, mientras que el fenómeno apenas se acusa en la industria (gráfico 2). Cada vez está más claro que durante la segunda mitad del pasado año y primeros meses del actual se produjo un fuerte repunte de la actividad constructora y de la contratación de personal en el sector público ligadas a la proximidad de las elecciones autonómicas y locales, algo que en España parece normal pero que en otras latitudes con más calidad democrática no se admitiría, pues supone un uso partidista del dinero de todos. Pasadas las elecciones, el ritmo de creación de empleo se modera. Esta es, por cierto, la razón principal de que el crecimiento de la economía se haya desacelerado en el tercer trimestre, como prevén el Banco de España y la mayoría de analistas privados.
GRÁFICO 3
Fuente: M. de Empleo.
Cabría esperar que el notable aumento de las afiliaciones se tradujera en una mejora de las cuentas del Sistema de la Seguridad Social, tal como contemplaba el presupuesto de este organismo, que fijaba el déficit para este año en 6.444 millones de euros (0,6% del PIB), frente a los 13.954 millones con que cerró 2014 (derechos menos obligaciones reconocidas). Sin embargo, el déficit va en aumento (gráfico 3). Hasta agosto los gastos van en línea con lo presupuestado, pero los ingresos por cotizaciones sociales aumentan sólo un 0,8% en vez del 6,8% previsto. La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal, en su reciente informe sobre los PGE-16, estima el déficit del Sistema de la Seguridad Social para este año en una cifra entre el 1,4% y el 1,6% del PIB. Esta desviación se trasladaría a 2016, por lo que la Autoridad pide que se estudie complementar los actuales ingresos del Sistema con transferencias del Estado o que se adopten otras decisiones para equilibrar el sistema.