Logo Funcas

La salud de los hijos de los inmigrantes en España: ¿realmente tienen ventaja?

Comparte esta entrada

La literatura norteamericana y, más recientemente, también la europea, se han referido a la llamada “paradoja del inmigrante sano”, que sugiere que, a pesar de que habitualmente ocupa posiciones más desfavorables que los nativos en el mercado laboral y en la estructura social y que experimenta problemas en el acceso a los servicios sanitarios, la población nacida fuera de sus sociedades de origen tiene mejores resultados en salud que los autóctonos.

En este trabajo analizamos un único indicador de salud, el peso al nacer, una de las medidas más utilizadas en el ámbito de la salud infantil y con importantes consecuencias a corto y medio plazo. El foco de atención se ha puesto mayoritariamente en el bajo peso al nacer, aquel que se encuentra por debajo de los 2.500 gramos. Existe evidencia de que el bajo peso al nacer correlaciona con riesgos graves después del nacimiento, incluyendo mayor mortalidad, y que sus efectos son duraderos. Las personas que nacen con bajo peso tienen peor estado de salud general (Johnson y Schoeni 2011) y sufren en mayor medida afecciones como asma, diabetes, enfermedades coronarias, síndrome metabólico y elevada tensión arterial (Barker 1995). También en el ámbito educativo el bajo peso se ha asociado con resultados negativos: los niños que nacieron con bajo peso muestran peores aptitudes en el momento en que comienzan la educación formal (Reichman 2005), más hiperactividad hasta la edad de 18 años (McCormick, Gortmaker, y Sobol 1990), menor probabilidad de completar la educación secundaria a la edad recomendada, menor nivel educativo final (Conley y Bennett 2000) y salarios más bajos en la edad adulta (Black et al. 2007). Menos atención ha recibido el alto peso al nacer, conocido como macrosomía, aquel por encima del umbral de los 4.000 o de los 4.500 gramos, dependiendo de la definición. Al margen de las mayores complicaciones durante el parto e inmediatamente después (Stotland et al. 2004), que incluyen una mayor mortalidad (Zhang et al. 2008), los niños con alto peso al nacer experimentan también un mayor riesgo de padecer enfermedades en la edad adulta que los niños nacidos dentro del rango normal de peso. Por ejemplo se ha asociado la macrosomía con un riesgo mayor de padecer diabetes de tipo 2 entre los hombres y de presentar obesidad en ambos sexos (Johnsson et al. 2015).

En el gráfico 1 se muestran las diferencias netas (controlando por los factores relevantes que se han considerado determinantes del peso al nacer como el nivel formativo de la madre, el número de hijos antes del nacimiento que se analiza, el sexo del bebé o el origen concreto de la madre) entre los dos grupos de interés, nativos e inmigrantes. Cuando la madre tiene origen inmigrante su bebé nace con más de 50 gramos de peso más, en media, que una mujer autóctona de similares características. Aunque existe cierta heterogeneidad en las diferencias entre los nativos y los hijos de los orígenes con mayor presencia en los datos, ninguna de sus pautas específicas se aleja de la tendencia general que apunta a un mayor peso medio de los niños de origen inmigrante.

Gráfico 1

Nota: Estimadores obtenidos a partir de una regresión lineal controlando por el sexo del recién nacido, la educación de la madre, y el número de hijos. Intervalos de confianza 95%. Fuente: elaboración propia a partir de las estadísticas del movimiento natural de la población.

Los hallazgos de este análisis son en principio coherentes con la “paradoja del inmigrante sano” que describíamos antes. No obstante, las evidentes diferencias en peso medio pudieran en realidad estar ocultando diferencias en los extremos de la distribución del peso al nacer. A continuación abordamos esta cuestión.

Gráficos 2a y 2b

Gráfico 2a
Gráfico 2b

Nota: Estimadores obtenidos a partir de una regresión logística binaria controlando por el sexo del recién nacido, la educación de la madre, y el número de hijos. Intervalos de confianza 95%. Fuente: elaboración propia a partir de las estadísticas del movimiento natural de la población.

Dado que la macrosomía fetal es un problema más acuciante entre la población inmigrante, es de esperar que estos niños estén asimismo sobrerrepresentados en los indicadores de excesivo peso y enfermedades asociadas como la diabetes de tipo 2.

En el gráfico 2a comparamos las probabilidades de tener un niño con bajo peso (frente a un niño con normopeso) que, como se aprecia, son superiores en el caso de las madres nativas. Incluso teniendo en cuenta el efecto mediador de otros factores que se asocian con el bajo peso, ser inmigrante parece proteger en cierta medida de este riesgo. En el gráfico 2b se comparan en cambio las distintas probabilidades de tener alto peso al nacer (frente a nacer con normopeso) en los dos grupos, de nuevo descontando la posible influencia de otras variables intervinientes. Las diferencias en este caso son mucho más marcadas y van en el sentido opuesto. Si tener una madre de origen inmigrante parece representar una ventaja para evitar el bajo peso, tiende, sin embargo, a incrementar de manera muy notable el riesgo de experimentar macrosomía fetal. Ofrecemos, en consecuencia, evidencia sobre la falta de adecuación completa de la llamada “paradoja del inmigrante sano” en la salud perinatal en España.

Nuestra investigación ofrece información relevante para documentar la creciente presencia de sobrepeso y obesidad en la población infantil y adulta en España. Sabemos que el alto peso al nacer está relacionado con pesos problemáticos en la infancia y la vida adulta y enfermedades vinculadas. Dado que la macrosomía fetal es un problema más acuciante entre la población inmigrante, es de esperar que estos niños estén asimismo sobrerrepresentados en los indicadores de excesivo peso y enfermedades asociadas como la diabetes de tipo 2. La intervención en los determinantes de la macrosomía, especialmente en lo que respecta a la obesidad materna y los hábitos de vida puede reducir su prevalencia y reducir de manera indirecta los problemas asociados al sobrepeso en la población infantil y adulta. Nuestro trabajo también pone de manifiesto la necesidad de producir más y mejores datos en España para estudiar los procesos de desarrollo infantil.

Esta entrada es un resumen del artículo La salud de los hijos de los inmigrantes en España: ¿realmente tienen ventaja?, publicado en el número 24 de Panorama Social. Puede acceder aquí al sumario y la descarga de la revista.

Comparte esta entrada