Con los datos de afiliación a la Seguridad Social y desempleo registrado de marzo publicados ayer, tenemos ya la imagen completa de cómo ha evolucionado el mercado laboral en el primer trimestre de 2017.
El incremento mensual de 161.752 en el número de afiliados equivale, una vez eliminada la estacionalidad, a un ascenso de 58.000 –según la desestacionalización realizada por Funcas—. En el conjunto del primer trimestre, la afiliación aumentó, en tasa anualizada, un 3,8% intertrimestral, igual tasa que la registrada el trimestre anterior.
Destaca la aceleración del crecimiento en el sector industrial, en el que el incremento en el primer trimestre fue del 3,8% —tasa intertrimestral anualizada—, frente al 3,1% observado el trimestre anterior. Este positivo comportamiento, en línea con el de otros indicadores de actividad en el sector, sería consecuencia fundamentalmente del crecimiento de las exportaciones, y puede que de un proceso, todavía incipiente, de sustitución de importaciones por producción nacional, ya que los indicadores de demanda nacional apuntan a un debilitamiento en este periodo.
Gráfico 1
No obstante, el resultado más llamativo es la intensa aceleración de la creación de empleo en el sector de la construcción, desde un ascenso del 5,6% en el cuarto trimestre de 2016 a casi un 10% en el primer trimestre de este año. Este resultado es consistente con otros indicadores que apuntan a un fortalecimiento de la recuperación del sector, como el consumo de cemento, la producción industrial de materiales de construcción o el crecimiento en el número de visados. Este repunte de la actividad procedería de la construcción de vivienda, ya que la obra pública continúa en niveles muy bajos.
«En el primer trimestre de este año se aceleró tanto el crecimiento del empleo como la reducción del desempleo, lo que apunta al sostenimiento de un sólido ritmo de crecimiento».
Es en el sector servicios donde se observa una suave desaceleración en el ritmo de crecimiento, que procede del subsector de servicios de mercado, ya que los servicios predominantemente de no mercado han intensificado su ritmo de ascenso.
Así, el empleo en el sector privado no agrícola —es decir, excluyendo los sectores agrícola y de servicios predominantemente de no mercado—, indicador que nos ofrece una mejor señal de la situación coyuntural de la economía, aceleró su crecimiento desde una tasa del 3,7% en el cuarto trimestre de 2016 hasta un 4% en el primero de 2017.
En cuanto al tipo de contrato, se aceleró el empleo indefinido y se desaceleró el empleo temporal, aunque este último sigue creciendo más que el primero. El empleo a tiempo completo creció a un ritmo muy semejante al empleo a tiempo parcial.
Con respecto al desempleo registrado, el descenso de 48.559 observado en el mes de marzo equivale, una vez eliminada la estacionalidad, a una reducción de 30.000, algo más modesta que la registrada los meses anteriores. No obstante, en el conjunto del primer trimestre la reducción del desempleo fue más intensa que en el trimestre precedente: un 10,4% —tasa intertrimestral anualizada— frente a un 10% en el cuarto trimestre de 2016.
En suma, en el primer trimestre de este año se aceleró tanto el crecimiento del empleo como la reducción del desempleo, lo que apunta al sostenimiento de un sólido ritmo de crecimiento económico.
